lunes, 30 de julio de 2012

HARTAZGO VITAL


Aún a riesgo de resultar oportunista les diré que no me gusta el fútbol en los Juegos Olímpicos. No me parece que deba ser un deporte olímpico. Así lo digo, alto y claro. Lo barruntaba desde hacía tiempo pero anoche me convencí a mí mismo por completo.

No por la derrota de España contra Honduras que, junto con la derrota del pasado jueves contra Japón también por 1-0, nos ha dejado sin opciones de pasar la primera fase y con el marrón de jugar un partido intrascendente contra Marruecos, la otra selección del grupo ya sin opciones en el torneo.

No es por eso, se lo aseguro. Es más una cuestión de falta de identificación personal con un deporte que promueve el engaño, el simulacro y las malas artes para aprovecharse del rival y, con un poco de suerte, dejarle en inferioridad. Que fomenta el todo vale con tal de ganar. Que es propio de la cultura del pillaje y de la falta de respeto a las reglas que, según parece, están hechas para romperlas y aprovecharse de sus lagunas.

No, no y no. No me creo el fútbol en los Juegos Olímpicos, oigan. Y empiezo a pensar que no me creo el fútbol en general. No estoy de acuerdo con su política y con lo que inculca en la gente. No me parece propio de un evento como los Juegos Olímpicos que supuestamente fomenta la amistad y fraternidad entre deportistas y pueblos, el fair play. Aunque eso también es relativo y daría para hablar largo y tendido y "a calzón quitado" como dice un amigo... 

Coincido con Javier Gómez Noya, nuestro triatleta, que hoy, en un tuit mañanero que suscribo y por supuesto he retwiteado, ha dicho: "No creo q el fútbol deba ser olímpico: no compiten los mejores y ese rollo de tratar de engañar al árbitro, tirarse, protestar...No en JJOO". Joder, la misma frase que solté yo anoche varias veces viendo los últimos quince minutos del partido. Créanme, tengo testigos y algunos de los habituales del foro saben quienes son.

Reconozco que no estaba viendo el partido puesto que ya venía un tanto hastiado de tanto fútbol últimamente y que si lo puse fue porque, trasteando por internet, vi que íbamos perdiendo y que quedaba apenas media hora para el final. Puse la tele pensando que iba a ver deporte, competición, esfuerzo y lucha por ser mejor que el de enfrente pero lo que me encontré fue otra cosa.

Me encontré con jugadores aprovechando cualquier mínimo contacto para tirarse y rodar por el césped como si los hubieran herido de gravedad. Me encontré con simulaciones de faltas y agresiones que provocaban  supuestas lesiones dolorosísimas. Me encontré con los españoles haciendo entradas sin sentido, fruto de su impotencia para ganar un partido ante un rival en teoría inferior. ¿Cuándo se darán cuenta de que lo único que consiguen con eso es provocar pérdidas de tiempo? Por cierto, a este tal Muniaín deberían escolarizarlo con carácter de urgencia, dicho sea de paso. Empujones, gritos, improperios de toda clase  para el árbitro, para la madre que lo parió y para demás familiares, cercanos y lejanos. De todo menos un partido de fútbol, de todo menos deporte. Mis nervios crispados, lo cual un domingo por la tarde-noche puede tener severas contraindicaciones. 

Y es que ya les digo que no veo encaje al fútbol, a este fútbol, ni en los Juegos Olímpicos ni en general en el deporte como tal. Si me apuran hasta me alegro de la eliminación de España. Por unos días dejaré de oír hablar de fútbol, que me tiene saturado con su violencia gratuita y tensión irracional. No sé ustedes pero yo no consigo echarlo de menos. Doce meses al año, veinticuatro horas al día, siete días a la semana fútbol, fútbol, fútbol... Van a conseguir desaficionarme sin remedio. Déjenme echarlo un poco de menos porque si no, como sucede con muchas otras cosas en la vida, empezaré a echarlo de más... 

¡Qué hartazgo, oigan!


miércoles, 25 de julio de 2012

UN PASO EN FALSO


Sí, reconozco que hasta ayer pensaba que España tenía alguna opción de ganar el oro olímpico en Londres. En baloncesto, me refiero. Frente a Estados Unidos, por supuesto. Ya sé que no escribí lo mismo no hace mucho en este mismo foro, lo sé. La culpa la tiene que el lunes por la noche tuve la oportunidad de poder ver de nuevo (sólo por segunda vez) el partido de la final de los JJ.OO. de Pekín 2008 y eso me dio cierta esperanza. Falsa esperanza, según parece...

Antes sólo había visto aquella final de 2008 el mismo día en que se jugó, en directo, con madrugón incluido, en un hotel a las afueras de Valencia, con cuatro amigos con los que me había ido aquel agosto ya agonizante para asistir al primer Gran Premio de Europa de Fórmula 1 que se organizaba en el circuito urbano de Valencia. Entre zumo de naranja recién exprimida y agua fresca pasaba la resaca y me pareció que nos ganaron "bien", que defendieron como leones, que fueron mejores y pare usted de contar.

Pero al volver a ver esa final... Ay, tuve la sensación de que aquel vil arbitraje nos restó muchas opciones. Pasos, pasos, pasos... Recordé que, con 8'13" por jugar, España perdía por solo dos puntos (89-91), que poco después Rudy se saltó el protocolo y se cascó ese brutal in you face ante Howard y que a 2'20" para el bocinazo final estábamos sólo cuatro abajo (104-108). Claro, inevitable, me metí en el partido como si no supiera el resultado final... ¡Por qué no pitas pasos a esos yankees superdotados, Jungebrand! ¿Dónde estabas mirando, Brazauskas? ¡¡Eso que acaba de hacer Kobe, en Euroliga lo pitas siempre!! Me dejé llevar, lo reconozco...



El parcial final de 3-10 para ellos y la derrota final 107-118 me dolió de nuevo. Pasos, pasos, pasos... Malditos pasos no pitados. Maldita disparidad de reglas a uno y otro lado del charco - en realidad, a uno y otro lado de las fronteras NBA-. Cuatro años esperando poder redimirnos de aquella injusta derrota que sólo los pasos no pitados nos quitó... 

Y así estábamos ayer, quien más y quien menos, con mucha fe y en medio de una fiesta bien montada, con bastantes caras conocidas, para disfrutar del probablemente mejor partido de basket que puede verse a día de hoy a nivel de selecciones nacionales. Homenaje a Navarro (quizá se echó de menos al presi de la FEB), himno USA cantado a capella para ponernos los pelillos de los brazos de punta, imagen de Pat Riley en la grada e instantáneo debate en twitter sobre si envejece bien o el paso del tiempo no perdona a nadie... (¡Joder, qué queréis si este tipo ya no cumplía los 40 cuando yo era un enano que botaba un balón que no abarcaba con ambas manos...!). Esta vez ganábamos. Fijo. Si les pitaban los pasos, claro. Pasos, pasos, pasos...

Quinteto NBA en España (Calderón, Navarro, Rudy, Ibaka y Pau), ganamos el salto, Pau responde con un triple a la primera canasta de Chris Paul, nos vamos de siete (10-3). Pasos, pasos, pasos... ¿Ahora que os pitan según las reglas FIBA qué, Kobe, no haces el gestito de mostrarnos a todos el "USA" de tu camiseta...? ¡Ahora sí os los pitan y no sabéis qué hacer eh, LeBron! ¡Not in our house!


No importaban los triples back to back de Carmelo Anthony porque lanzamos contramedidas: cuatro canastas consecutivas de Ibaka (tres mates seguidos más tiro en suspensión de media distancia) y triple de Víctor Sada y... 23-13.

Vaya, nos meten un 0-8 para terminar el cuarto. 23-21.

A partir de ahí, con 25-21 al inicio del segundo cuarto, Krzyzewski se enfadó y metió a su cinco inicial de golpe de nuevo en el partido. Enfrente nuestra "segunda unidad" - Sada, Llull, San Emeterio, y Claver- ayudados por Pau poco pudo hacer. Lo siguiente que se supo fue que se pusieron 32-42 con 21 puntos de Carmelo Anthony (5/5 en triples hasta ese momento) y que únicamente Ibaka aguantaba a España en el marcador con sus 16 puntos.



Problemas para parar su transición tras rebote, nulo balance defensivo, desconcierto en ataque (5 de 19 en triples y 17 de 30 en tiros libres para nosotros), ahogo general provocado por su intensidad en el perímetro (20 pérdidas contra sólo 5 robos de balón), festival de Kentucky de tiro exterior... 40-48 al descanso y más de lo mismo en el segundo tiempo hasta el 78-100 final. Decepción...



Gasol gana en el salto a Kevin Durant



Y es que tras cuatro años pensando en pasos sin pitar que nos alejaron del oro, quizá lo más realista ahora sea pensar que el único que por desgracia ha ido un poco más lejos de lo racional y que ha dado un paso de más hemos sido nosotros. Un paso en falso que espero podamos enmendar.


miércoles, 18 de julio de 2012

CHÁNDAL DE GALA


Quiero pensar que el responsable del C.O.E. que, en última instancia, tomó la decisión de aceptar las propuestas de Bosco lo hizo en un momento de enajenación mental transitoria que le impedía ser dueño de sus actos y que no pretendía generar aún más alboroto en este país en el que ya vamos sobrados de vergüenzas propias y ajenas.

Digo yo, porque la única alternativa que podría explicar haber llegado a cometer esta fechoría es que dicho responsable tiene una completa falta del más mínimo sentido del gusto y del saber estar.

Sea como fuere, a poco más de una semana para la ceremonia de apertura de los JJ.OO. de Londres las redes sociales (en especial, twitter) hechan humo y claman contra el diseño definitivo (si es que aquel boceto que nos enseñaron a modo de globo sonda hace un par de meses no era ya el definitivo porque no encuentro las diferencias) de la ropa con la que el equipo español ha de presentarse al mundo.

Boceto presentado en su día al público por el C.O.E.

Estaba la cosa calentita desde la publicación del llamado boceto y se ha puesto que arde cuando los deportistas españoles han empezado a colgar fotos en twitter vestidos con las prendas elegidas para la ocasión -abajo podéis ver las fotos colgadas por el piragüista Saúl Craviotto (izquierda) y por el jugador de hockey Álex Fábregas (derecha) en twitter ayer martes-.



La verdad es que no es para menos la sorna que se ha montado alrededor de todo esto...

"Pedirle a un rival que te cambie la camiseta y ver el pánico en su cara", escribían unos.
"Para que el mundo vea que España necesita ayuda", decían otros.
‎"Para recoger el balón de oro, fundirlo y hacerte una cadena guapa", leí a alguien con talento evidente para esto del tuit.
"Para usarlo como cortinas en un restaurante chino".

O mi favorito, "El chandal no es para ir a por el oro, es más para ir a robar cobre".

Esos son, entre otros muchos, los usos que la gente cree más apropiados para la equipación olímpica (el hashtag #UsosChándalOlímpico como trending topic en España y lo que te rondaré, morena...). Y es que es difícil saber qué ocasión sería apropiada (si es que la hay) para "lucir" tal indumentaria...
Porque una cosa es adoptar un determinado estilo en el vestir y otra distinta disfrazarse. Porque uno puede decidir vestir más clásico, como el diseño de Armani para el equipo italiano.
armani juegos olimpicos

Incluso tirando a pelín pijo rancio propio del Asombroso Mundo de Pocholo y Borjamari en el Aguacates, como puede parecerle a alguien el uniforme de Ralph Lauren para el equipo de Estados Unidos.

Pero uno no se debe disfrazar si no es en las fiestas habilitadas al efecto. Y es que hay quien no entiende la diferencia entre lo uno y lo otro. Entre tener estilo propio y disfrazarse. Uno no debe hacer el ridículo y presentarse con semejante chándal de gala, como decía aquella insufrible canción de Junior Míguez, a un evento que se presupone serio, relevante y en el que vas a representar a tu país como son unos JJ.OO. Porque tan ridículo es ir de etiqueta a la playa como pesentarte en una cena en camiseta sin mangas y chanclas. Por muchos tatuajes y followers que tengas o goles hayas metido en una sola temporada...
  
Como mi amigo Charles aquella noche como otra cualquiera que salimos de copas allá cuando teníamos 17 años y que se quedó compuesto y sin amigos a la entrada de la discoteca de turno por mantenerse en sus trece de no ponerse unos míseros zapatos por considerar que llevarlos era disfrazarse. Claro, después de esa noche no le quedó más remedio que ponerse los zapatos aunque estuvieran sucios y medio rotos, sí. Pero zapatos al fin y al cabo.  

Porque el aspecto de una persona dice mucho de ella y, en este caso, de un país. Y es que me temo que pasará, que la prensa internacional nos tomará por lo que no somos. O por lo que quizá desgraciadamente sí. Porque el uniforme que presenta España para estos JJ.OO. no es propio de tal evento. Y el resto del mundo sólo podrá pensar que no estamos en nuestro sano juicio, que hemos confundido julio con febrero, Londres con Venecia o la botella de agua por la de ginebra.


Es lo que hay, me temo. Encarguemos nuestro chándal de gala...
"Yo me pongo mi chándal de gala y qué bonito estoy.
Con arte, con clase, la base de ritmos tajaos.
Dentro de mi cabeza hay un humano tarao.
Y dentro de mi pecho hay un loco enamorao.
"


jueves, 12 de julio de 2012

"SE ME APETECE"

Como dirían mis buenos amigos sevillanos -que espero entiendan esto como un homenaje sincero hacia ellos y su tierra- "se me apetece".

Sí, "se me apetece" que empiecen ya los JJ.OO. y, en especial, el gran torneo de baloncesto que nos espera. Entre tanto partido de preparación se me ha abierto el apetito de buen baloncesto.

Y es que el pasado fin de semana, mientras me imbuía a base de tragos largos en el maravilloso embrujo de Sevilla celebrando la boda de mis queridos y admirados Bea e Iván, la USA Basketball anunció los doce jugadores que van a formar su equipo en los JJ.OO. de Londres. Aquí los tienen.


Entre canapés, tartares de atún y copas llenas de alegría uno de los asistentes al enlace con el que trabé conversación fluida y repetidas visitas a la barra libre del lugar me pidió mi opinión sobre los seleccionados de Estados Unidos y por las opciones de nuestra selección frente a ellos, como dando por hecho que la final entre Estados Unidos y España está cantada y servida. Algo así como si se tratara de la final de Champions entre Madrid y Barça, que todos pensamos que iba a ser pero que después nunca fue.

A mi partener de copa en mano le parecía que los americanos tienen un equipo descompensado (mucho base y alero y poco tío alto) y que España les puede hacer daño. La verdad es que en ese momento le dí la razón medio convencido, medio poco interesado pero durante los últimos días he venido pensando sobre el asunto y creo que para poder sacar algo en claro lo mejor es comparar los jugadores que cada equipo lleva en cada posición. Quizá así podré llegar a alguna conclusión no viciada por la "felicidad" de la que hacía gala en aquel momento.



Bases:

España: Sergio Rodríguez (6), José Manuel Calderón (8) y Víctor Sada (15).

Estados Unidos: Russell Westbrook (7), Deron Williams (8) y Chris Paul (13).

El único base que puede competir con alguno de los bases americanos es Calderón que ya lo hace día sí y día también en la NBA. Sergio Rodríguez sólo puede competir en campo abierto, a la contra, corriendo tras rebote. Sada puede defender bien pero físicamente los americanos son superiores.

A bases puros estamos empatados ya que Westbrook y Rodríguez son otra cosa, cada uno a su estilo. Rodríguez capaz de lo mejor y lo peor y Westbrook, más anotador que director de juego, un "2" en un cuerpo de "1".

Opino que los bases americanos son superiores a los nuestros en conjunto. Lástima tu lesión, Ricky...

Aleros:

España: Rudy Fernández (5), Juan Carlos Navarro (7), Víctor Claver (10), Fernando San Emeterio (11) y Sergio Llull (12).

Estados Unidos: Kevin Durant (5), LeBron James (6), Kobe  Bryant (10), James Harden (12) y Carmelo Anthony (15).

La mera comparación, ofende. Cuatro superestrellas NBA por Estados Unidos contra Navarro y Rudy, básicamente. Y Navarro lesionado. Fascitis plantar. Molesta y duradera. Nos superan en calidad, estatura, potencia física,... Rudy pierde cuando juega más de "3" que de "2" (su puesto natural por mucho que digan) y tendrá que hacerlo para compensar que Navarro no esté al 100%. Claver no ha demostrado nada aún aunque Portland acabe de anunciar su fichaje por tres años. Y Llull y San Emeterio son jugadores a los que puede que la ACB les quede pequeña pero cualquier otra competición superior (Euroliga por no decir NBA) les queda lejos de su alcance.

Me temo que en este puesto la batalla está claramente decantada para Estados Unidos.
Pivots:
España: Pau Gasol (4), Felipe Reyes (9), Marc Gasol (13) y Serge Ibaka (14).

Estados Unidos: Tyson Chandler (4), Andre Iguodala (9), Kevin Love (11) y Blake Griffin (14).

Esta es la posición en la que menos diferencias existen entre ambas selecciones. Incluso si eliminamos a Reyes y a Iguodala diría que España, si no superior, está a la altura de los americanos. Marc puede con Chandler a pesar de que éste sea el vigente Jugador Defensivo del Año y lo que quieran. Pau e Ibaka compiten de tú a tú con Love y Griffin. El desajuste está en Reyes. Y no por Iguodala, un "4" con alma (y cuerpo) de "3" sino porque la rotación sufre con él. La solución: minimizar los minutos d Reyes en pista cuando se juegue (si es que sucede) contra Estados Unidos. 

A priori, debemos competir de igual a igual y podríamos hasta dominar.

En resumen, creo que de 100 enfrentamientos Estados Unidos ganaría 98. Eso sí, a los puntos no por K.O. ni mucho menos. Quizá salgamos de dudas en el aperitivo de la teórica final del próximo 24 de julio en Barcelona, donde ambos equipos se enfrentarán en partido de preparación (y poco amistoso). Veremos... 

En cuanto a las opciones de medalla de España (algo que muchos dan por prácticamente seguro...), evidentemente las tiene aunque no creo que sea tan superior a otros rivales (como Rusia, Lituania, Francia, Argentina,...) como para pensar que alcanzar la final es cosa fácil.

Pero a pesar de que el pescado parece vendido y que todo apunta a que el oro ya tiene dueño preasignado, "se me apetece" y mucho disfrutar de baloncesto cinco jotas.

Y ya puestos a hablar de cosas apetecibles,  aprovecho para dejarles aquí unas breves recomendaciones por si el destino les lleva este verano a hacer parada y fonda en tierras hispalenses:
- Puratasca:
  

Para empezar la noche con un tapeo del bueno, bonito y barato. Raciones generosas y un gran servicio. Todo ello en un escondido rincón de Triana (calle Numancia nº 5) y a un precio que no creerán posible.


Si lo visitan no les defraudará.


El arroz meloso que allí hacen quita el "sentío".


Les recomiendo ir temprano ya que de lo contrario es prácticamente imposible encontrar sitio.


http://puratasca.blogspot.com.es

- Terraza Puerto de Cuba:
Para continuar, uno de los lugares de referencia de la noche hispalense.


Disfrutar de unas copas entre amigos desde la calle Betis, al borde del Guadalquivir y con vistas a la Torre del Oro no tiene precio, se lo aseguro.


No dejen de visitarlo. Simplemente excepcional.


http://www.puertodecubasevilla.com

Y para terminar, como nunca me ha gustado planear el fin de fiesta (soy de los que prefieren dejarse llevar) hagan lo que "se les apetezca". No cabe duda de que en esta ciudad les tratarán como ustedes merecen.


ACTUALIZACIÓN: 12.07.2012, Blake Griffin se ha lesionado. Su sustituto, Anthony Davis, #1 del Draft de este año. En teoría, esto potencia la superioridad de España en el poste.

viernes, 6 de julio de 2012

ME DESESPERO DE ESPERARTE

Siempre me ha gustado el mes de julio. Aquellos que me conocen saben que hay variadas razones para ello. Pero veo que cada año que pasa me desespera un poco más.

Intentan engañarnos diciendo que en julio ya es verano pero todos sabemos que eso de que el verano ya llegó ya está aquí es pura fachada, pura mentira. 

Y es que el verano ya está aquí y es para quedarse, sí, pero para la chavalería no para nosotros, los adultos. Y lo peor no es que el nuestro no haya llegado aún sino que cuando llegue, pase y ya casi se nos haya olvidado, el otro verano, el de verdad, el bueno, el de toda la vida, el de los dedos arrugados en la piscina, el del Marca en una mano y el Tang de Naranja en la otra ni siquiera habrá terminado.

Qué triste cuando se pasa la vida...

Y es que julio me empieza a desesperar. Porque quiero, necesito, que vuelva la competición ya, el día a día de la liga, la ACB y la NBA. Porque quiero ver ya a Rudy de nuevo como rey blanco de su Palacio (aunque lo de Tomic me haya sentado como un navajazo oxidado). Porque no puedo parar de imaginarme cómo le quedará el púrpura y oro a Steve Nash, me suena raro. Y qué número llevará... Elige bien, Steve, que tu "13" está retirado. Qué ganas de ver por fin a mis Lakers dirigidos en cancha por alguien digno de ello. Pero también qué angustia me da pensar que vaya a ser justo ahora cuando el "16" no esté a su lado para recibir pases allí en lo más alto.

%categories Steve Nash a los Lakers, se salvo Kobe

Julio me desespera por no poder ver los fichajes de Mourinho sobre el campo. Por ver si juegan algo este año. Modric está muy bien, José, pero prefiero a Silva o a Mata de aquí a Kiev, ida y vuelta, como ustedes también lo prefieren, estoy seguro. Qué quieren que les diga, mi sentimiento patriótico está en un constante rally inversamente proporcional al de nuestro descarriado Ibex35, superando los 10.000 puntos básicos y subiendo... Ya les dije hace unos días que últimamente lo veo todo rojigualda.

Me desespera el calor de julio en Madrid, calor sin piedad que no entiende de si para mí ya es verano o sigo con la corbata anudada y la piel blanca nuclear. Me desespera que en julio todo el mundo trate de cerrar deprisa y corriendo sus asuntos como locos, esos que han dejado vagar a la deriva durante meses, para poder irse tranquilos a sus frenéticas vacaciones. Me desespera no ver la hora de poder quitarme la camisa y los gemelos, meterlos al fondo del cajón y ponerme el último polo que aún no he podido estrenar.
Y todos los años me pasa igual pero noto como si este año me pasase quizá más. Puede que sea que en lo que va de mes de julio no me he refugiado bastante en las terracitas de verano (cada vez más también de primavera, otoño e incluso de paraguas en mano), esperando que la Luna tome el Sol de madrugada, entre copas de sabor amargo y sonrisas al viento. Puede que necesite más esas tertulias con amigos sobre planes bien alejados del fragor madrileño.

Puede que sea que este julio yo estoy más viejo o puede que simplemente sea que no llegas y yo te espero. Que dijiste que venías pero no dijiste cuándo. Que ahí dentro estás a gusto, claro. Y que este mundo es cruel, lo sé. Pero los que estamos fuera te esperamos y te queremos. Aunque ni siquiera te hayamos podido ver aún esa cara de pillo y travieso que me juego traes de serie. Que hace un calor indigno y tú no quieres asomarte. Que te quiero contar lo de Kiev para que seas parte de ello. Que tengo ganas de verte. Que me desespero de esperarte...

A Juan. Lo más grande que mi hermana y Jorge me pueden dar.

lunes, 2 de julio de 2012

GRACIAS, SELECCIÓN


No olvidaré que volvisteis a ganar. Por segunda vez consecutiva, tercera en total. Darme vida sin parar...

No olvidaré las paradas de Casillas. 

No olvidaré la seguridad de la defensa. Un solo gol en contra.

No olvidaré el trabajo por la banda de Arbeloa. El despliegue físico sin fin de Jordi Alba. Las incorporaciones en ataque de Piqué. Los huevos que tiene Sergio Ramos.

No olvidaré la clase y el criterio de Xabi Alonso. El equilibrio que da Busquets. El toque de yo-yo que tienen Silva, Xavi e Iniesta. Los huecos que genera Torres, y sus goles. Tu pase a Mata en la final bien vale esa bota de oro, Fernando.

No olvidaré el orgullo y determinación de Cesc. La velocidad de Navas y el cambio de ritmo de Pedro.

No olvidaré a todos los demás. Sus carreras para irse a abrazar. Veros jugar siempre unidos, con "9" y sin él. Ser siempre un equipo de 23.

No olvidaré el empate contra Italia en el primer partido. El buen juego contra Irlanda y la agonía del partido con Croacia.

No olvidaré el repaso a Francia y la emoción de los penaltis contra Portugal.

No olvidaré los cuatro goles de la final.

No olvidaré los grandes momentos que me habéis hecho pasar. Hablar con niños que no saben lo que es veros perder...

No olvidaré las reuniones con mis amigos frente al televisor. Los goles e himnos sin letra que con orgullo me habéis hecho gritar. Las copas que me he tomado a vuestra salud. La fiesta en Cibeles. Ver nuestra bandera decorando las calles de Madrid y ondeando en vuestros brazos.

No olvidaré los sueños que habéis hecho realidad, una vez más.

¡Gracias, selección!

Os dejo aquí el homenaje que mis amigos de Showpay han hecho a nuestra selección.